Encuesta de innovación “real” entre empresas españolas (Marzo 2025)
Resumen Ejecutivo
Hallazgos Principales
Valoración alta de la innovación, pero no siempre prioritaria: Un 59.3% la considera “crítica” y el resto la ve “importante” sin ser prioridad absoluta.
Falta de metodología: Un 44.4% cuenta con algún equipo formal de innovación; sin embargo, el 63% declara no disponer de estructura ni método adecuado.
Enfoque en productos, procesos y digitalización: Son las áreas más trabajadas, mientras cultura y organización interna quedan rezagadas (0% las menciona como área prioritaria).
Obstáculos: Principalmente escasez de tiempo/recursos y falta de metodología. La resistencia cultural también influye (37%).
Ejecución como gran reto: La mayoría de empresas reconoce que el principal reto no es la generación de ideas, sino la ejecución y escalado de las mismas.
Recomendaciones Clave
Formalizar procesos: Implementar metodologías ágiles, design thinking o programas internos con recursos y calendario definido.
Abordar la cultura organizativa: Invertir en formación y comunicación interna para reducir resistencias y alinear a los equipos con los objetivos de innovación.
Crear planes de asignación de recursos: Garantizar tiempo y presupuesto para proyectos innovadores, de modo que la improvisación no monopolice la agenda.
Definir indicadores y metas: Concretar KPIs de innovación (nuevos productos, mejoras en procesos, satisfacción del cliente) para medir el progreso.
Equilibrar productos y experiencia del cliente: Potenciar no sólo el desarrollo de la oferta, sino también la percepción y uso final, cerrando la brecha entre producto y mercado.
Con estas medidas, las organizaciones pueden pasar de la innovación basada en impulsos espontáneos a una dinámica más estratégica y sostenible, maximizando el valor de las iniciativas y minimizando la desconfianza o el desgaste interno.
Perfil
La mayor parte de las empresas encuestadas (37%) se ubica en la franja de 51 a 200 empleados, aunque hay una proporción significativa de microempresas (22.2%) y grandes compañías (22.2%). Esta mezcla sugiere que las conclusiones sobre innovación abarcan realidades muy diversas, donde el tamaño afecta la disponibilidad de recursos y la estructura de innovación.
“En términos generales, ¿cómo describirías el enfoque de tu empresa hacia la innovación?”
Lo hacemos de forma constante (51.9%)
Innovamos, pero de forma más espontánea o reactiva (40.7%)
Apenas innovamos, mantenemos lo que funciona: (3.7%)
Solo innovamos cuando hay una necesidad urgente: (3.7%)
La mayoría (51.9%) se considera innovadora de forma constante, mientras que un 40.7% actúa de manera más reactiva. Esto sugiere cierta voluntad de innovación, pero no siempre bajo un proceso planificado. Un pequeño porcentaje apenas innova, lo que indica que todavía hay organizaciones rezagadas.
“¿En qué medida consideras que la innovación es una necesidad en tu empresa?”
Crítica, es clave para nuestra competitividad (59.3%)
Importante, pero no siempre prioritaria (40.7%)
No es una necesidad relevante (0%)
Secundaria, no afecta demasiado a nuestro negocio (0%)
El 59.3% considera la innovación “crítica”, y el 40.7% la cataloga de “importante” pero sin asegurar su prioridad. Nadie la juzga irrelevante, por lo que hay un consenso claro en cuanto a su valor. Sin embargo, el matiz “pero no siempre prioritaria” refleja que la falta de planificación puede dejar la innovación en un segundo plano.
“¿Cómo se generan las iniciativas de innovación en tu empresa?”
Hay un equipo o proceso formal dedicado a ello (44.4%)
No tenemos un proceso definido para esto (33.3%)
Surgen de forma espontánea dentro de los equipos (18.5%)
Solo se plantean cuando hay un problema o necesidad clara (3.7%)
Aunque el 44.4% cuenta con un proceso o equipo formal, un 33.3% reconoce que no hay un método definido y el 18.5% se apoya en la espontaneidad. Esto sugiere que más de la mitad de las empresas podrían estar innovando sin una estructura sólida ni un procedimiento recurrente.
“¿En qué áreas de la empresa innováis con mayor frecuencia?”
Procesos internos y eficiencia operativa (59.3%)
Desarrollo de nuevos productos/servicios (51.9%)
Digitalización y automatización (48.1%)
Experiencia del cliente y relación con el mercado (37%)
Organización y cultura empresarial (0%)
Other (Herramientas de comunicación) (3.7%)
Se aprecia un foco claro en procesos internos, nuevos productos y digitalización. Llama la atención que ninguna empresa haya señalado la organización/cultura como área prioritaria, a pesar de que en preguntas posteriores se mencionen resistencias internas como barrera.
“¿En qué áreas de la empresa crees que deberíais innovar más de lo que lo hacéis en la actualidad?”
Desarrollo de nuevos productos/servicios (55.6%)
Procesos internos y eficiencia operativa (51.9%)
Digitalización y automatización (37%)
Experiencia del cliente y relación con el mercado (29.6%)
Organización y cultura empresarial (25.9%)
La mayoría desea reforzar la creación de nuevos productos y la eficiencia operativa. Se ve un relativo incremento en la conciencia de que la cultura interna necesita innovación (25.9%), pero sigue quedando por debajo de otras áreas más tangibles (procesos, productos).
“En cuanto a la velocidad, ¿cómo calificarías la capacidad de tu empresa para innovar?”
Ágil: en pocos meses podemos lanzar nuevas iniciativas (59.3%)
Lenta: las innovaciones tardan años (o muchos meses) en materializarse (29.6%)
Muy rápida: nos adaptamos o innovamos en semanas (7.4%)
Prácticamente no innovamos (3.7%)
Casi un 60% se autopercibe como “ágil”, aunque la experiencia previa en otras respuestas sugiere que esto puede ser más una rapidez de reacción que una planificación recurrente. Cerca del 30% reconoce lentitud, un dato significativo para la competitividad en mercados cambiantes.
“¿Con qué frecuencia se introducen cambios o innovaciones significativas en tu empresa?”
Ocasionalmente, sin una periodicidad fija (48.1%)
Varias veces al año (33.3%)
Una vez al año (14.8%)
Casi nunca (3.7%)
El 48.1% menciona que los cambios no tienen un calendario o ciclo definido, lo que refuerza la idea de que gran parte de la innovación ocurre de forma esporádica. Tan solo un tercio (33.3%) maneja múltiples innovaciones por año. Este factor puede dificultar el seguimiento y la medición de resultados.
“¿Cuáles son los mayores obstáculos que encuentras para innovar en tu empresa?”
Falta de tiempo o recursos (77.8%)
Falta de metodología o estructura para innovar (63%)
Resistencia al cambio dentro de la organización (37%)
Dificultad para identificar oportunidades de innovación (14.8%)
La insuficiencia de tiempo/recursos y la falta de una metodología son los obstáculos que más se repiten. La resistencia cultural (37%) coincide con la escasa atención prestada a la gestión del cambio en secciones anteriores. Todo ello indica que, aunque haya voluntad de innovar, faltan estructuras y rutinas capaces de sostenerla.
En una escala del 1 al 10, ¿cómo valorarías el nivel de innovación de tu empresa en las siguientes áreas?
“Desarrollo de productos o servicios”
El área de desarrollo de productos/servicios recibe una valoración relativamente alta, con un promedio de 7 sobre 10. Sugiere cierta confianza en la capacidad de crear o mejorar la oferta, aunque no se especifica el nivel real de sistematización.
Procesos internos y eficiencia operativa”
La nota media es algo inferior (6.3) en comparación con productos/servicios, lo que denota margen de mejora en la optimización de procesos. Varios encuestados han indicado la relevancia de innovar más en este ámbito.
“Experiencia del cliente y relación con el mercado”
Con un 6.0 de promedio, la experiencia del cliente se sitúa en un nivel intermedio, por debajo del desarrollo de productos (7.0). Puede reflejar que se invierte más en el “qué” (productos) que en el “cómo” y “para quién” (experiencia de uso y relaciones con el mercado).
“Si tuvieras que mejorar un aspecto de la innovación en tu empresa, ¿cuál elegirías?”
La ejecución y puesta en marcha de nuevas iniciativas (63%)
La organización interna para gestionar la innovación (51.9%)
La capacidad de escalar innovaciones exitosas (48.1%)
La generación de ideas (25.9%)
La mayoría (63%) ve la ejecución como el punto clave a mejorar, por encima incluso de la organización interna y la escalabilidad. Esto confirma la hipótesis de que la falta de estructura y recursos dificulta la materialización de las ideas existentes.
